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jueves, 24 de diciembre de 2009

Mensaje Navideño.







Cuando me llegó la hora de escribir el mensaje navideño, me detuve seriamente a pensar que escribir.

No resulta fácil, pero al ver estas fotos, que en un principio no tenían nada que ver con la Navidad, me dieron ganas de escribir.

Miles de veces escuche: “los niños son el futuro”.
Con el tiempo fui llenando de significado la oración.

¿Por qué son el futuro?

Porque no solo van a ser nuestros sucesores.

Personalmente, encuentro que son los avanzados.

Con la gran capacidad de aprendizaje, no hay desafío imposible, todo lo aprenden, crecen, comparten y juegan. Duermen tranquilos, tienen una ambición sana, quieren crecer y ser “grandes”. No destruyen su entorno, juegan con los animales, te regalan una sonrisa, necesitan de su familia y quieren ser como sus padres. Los niños cambian el mundo, exigen a los grandes, educan a sus adultos.
Piden y exigen, pero devuelven y conceden.
Son felices sin dinero y tanto una caja vacía como el juguete más caro, los hace felices por horas.

Aun así son las grandes victimas. No piden nacer, no pueden hacer política, ni auto sustentarse, ni unirse para ser más fuertes. No pueden defenderse.

Nacen inocentes, creen en las personas y se alimentan del amor.

Entre otras tantas cosas, así son los niños.
Con todos esos valores que los adultos queremos predicar, cambiar o corregir.

Son el futuro, no solo porque van a crecer, sino porque tienen en sí, lo que el futuro necesita.

Por eso en Navidad, no importa de la religión que seas, fomenta el buen futuro de la humanidad, como los niños.

Hoy llega Papá Noel, el Viejo Pascuero o Santa Claus, como le llamen donde vivas. Hoy todos los niños son los grandes protagonistas.

Mi regalo es el deseo de un mundo mejor, lleno de paz y prosperidad, lleno de niños felices y adultos trabajando por lograrlo.

¡Muy Feliz Navidad!

Sinceramente:

Marcelo González Calero.


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