Editoriales publicadas.

(Publicación dinámica)

Robinson Alonso Vargas Acevedo is a Murderer. Diego Federico González Calero, Innocent.

12.05.13

We, Diego Federico González Calero’s family, one year and seven months after his death, would like to announce that the Chilean Justice System has convicted Robinson Alonso Vargas Acevedo of homicide.

On May 2, 2013 a hearing was held at the Pichilemu District Court to determine the criminal responsibility of the accused, Robinson Alonso Vargas Acevedo, in Diego’s death.

At that hearing, Vargas Acevedo pleaded guilty to the charges brought against him by both the prosecuting attorney and the plaintiffs in the case, accepting the facts on which the charges were based and which were obtained through a thorough investigation.

As such, the District Court, after hearing arguments by the defense as well as the prosecution, issued it’s verdict, finding Robinson Alonso Vargas Acevedo guilty of homicide in the death of Diego.

Because of the above verdict, it can be categorically stated that the actions of the convicted murderer, Vargas Acevedo, were never an act of self defense, as was initially claimed.

This verdict proves that Diego never intended to steal anything from Vargas Acevedo, nor did he try to break and enter his residence.

We can say, with absolute certainty, that there is no cause or reason in Diego’s death other than that of the despicable act of Robinson Vargas Acevedo, who shot him in the back when he had no possibility whatsoever to defend himself or to counter the attack.

The court gave Vargas Acevedo a conditionally suspended sentence of 3 years, leaving a cold blooded murderer, with a violent nature, to live among the good people of Pichilemu.

We regret that the Chilean Justice System believes that a convicted murderer need not serve his sentence in jail, but instead they allow him the same freedoms as those of upstanding citizens.

We also do not feel that a sentence of three years is fair, given that his actions caused eternal consequences.

Robinson Vargas had the opportunity to defend himself, with his lawyer, before the justice system of his country, and even though he lied, he was assumed innocent until found guilty. These are the basic civil rights that he denied Diego.

We regret that the convicted murderer’s father has to suffer the consequences of his son’s actions, and even though we understand his desire to defend him, we do not agree with his lying and his obstruction of justice.

We would like to thank the criminal investigative police (PDI) of Chile and their experts for their professionalism; the District Prosecuting Attorney, Rodrigo Troncoso; the Consul of the Oriental Republic of Uruguay; the Chilean public employees who, regardless of their role, shared their humanity; and all of the people who never stopped believing that the story being told was unjust, and today have their convictions confirmed.

We would like to profoundly thank the untiring and professional work of our lawyers, Magdalena Nagel and Eduardo Haddad.

Thanks to all of you who have followed the case closely and to those who have waited faithfully in silence.

There never was any self defense, nor robbery, nor presence on the roof or inside the residence, only a murderer who illegally carried a weapon and shot Diego twice in the back, without the need to do so, with 100 meters of visibility to recognize a person, in this case Diego, who was his neighbor for a weekend.

Diego was, and will always be, an extraordinary person, a good son and brother, a great friend, a complete and happy human being.

Gustavo A. González. Father.

Ana María Calero. Mother.

Marcelo González Calero. Brother.

 

SOBRE EL TALLER DE MÚISICA Y POESÍA.

21.11.12

Ayer 20 de noviembre de 2012, tuve el placer de concurrir al acto de cierre del Taller de música y poesía dirigido por Washington Benavides, Héctor Numa Moraes y Mario Paz, al cual me incorporé en los últimos meses de este año. La entrada al acto como la participación en los talleres es gratuita y amparada por la Universidad de la República Oriental del Uruguay; si gusta participar hay que esperar hasta marzo del 2013, pero puede escribir mientras, nunca son suficientes las letras…

En este cierre, las gargantas de Numa y Mario, interpretaron 26 canciones aproximadamente, de 26 poetas uruguayos. Es decir, escritas, creadas e interpretadas por uruguayos, en una de las muestras más ricas de cultura que tuvimos el privilegio de compartir con poetas cubanos y puertorriqueños.

Este esfuerzo como en años anteriores, se verá plasmado en un CD que reúne una selección de las mejores canciones del taller.

Todo esto, y aquí es donde comienza mi opinión, lo considero de una riqueza cultural importantísima, donde resumidamente nada más que en el cierre se presentaron 30 artistas uruguayos, algunos más famosos que otros, pero todos con ganas de aportar el granito de arena a la cultura nacional. Tal vez, pienso en mis delirios, sería bueno que a nivel Ministerial, se interesaran, declararan de interés de “algo” por lo menos, difundieran, apoyaran, en fin, hicieran su trabajo. Tal vez sea buena idea que las autoridades que apoyan el futbol, el carnaval y cuánto artista extranjero viene, se dieran una vuelta un ratito por la Facultad de Bellas Artes y vieran cuanta cultura, educación, arte y esfuerzo personal hay detrás de las paredes, todos los días.

Los (super) profesores enseñan, componen, cantan, difunden, llevan a los estudiantes a la radio… Pocos profesores en el mundo deben de ser tan completos y por tan poca paga. 

Muchas gracias a ellos.

M.G.C.

COMPARTIENDO EL SILENCIO…


Ago. 12

Miro el cielo con ojos de calma y piedad,

Sus blancas nubes pasan casi sin percibirme…

Siento que es bueno de vez en cuando,

Levantar la mirada para contemplar su presencia.

¿Será que poco lo hacemos ?...

-me pregunto o me lo dices…-

No siempre lo hago, sí lo hacía…

Me respondo…

Miro el cielo y buscando paz te contemplo…

Te veo, te escucho,

¿Será porque hace mucho que no te abrazo, ni te veo, y con sutileza te siento?

Sí siento que es bueno buscar en él, lo que el silencio no da,

Volar en ti me refresca el alma, aunque el silencio siga allí…

Ya casi no escucho tu voz…

Y aunque quiero hacerlo, el tiempo todo lo borra…

No sé si por sabio…

No sé si por eterno,

Sólo sé que no te miro, no te escucho, pero te siento,

Siento que el cielo me es aliento y las nubes tu mensaje,

Y ahora por un rato, compartimos un encuentro… 

G.G.

¿QUÉ QUERÉS… VELOCIDAD O PRECISIÓN?

30.03.2012

Hay un simple y viejo chiste, que no por viejo pierde vigencia. Es más, parece que va de camino a convertirse en una de esas populares leyes sociales, que son casi físicas.

Dice así: Una persona le dice a la otra - ¡Rápido! ¡Rápido! ¿Cuánto da, dos por dos? y rápidamente le responde: - ¡Cinco!

- ¡No, bruto! ¡Dos por dos es cuatro!

- Bueno… (Le responde en tono de excusa) ¡Me pediste velocidad, no precisión!

¿Es simple no? Tal vez alguien piense que estoy sub estimando su intelecto… No, nada más lejos de eso. Pero fíjense en este caso reciente y van a ver que parece chiste, aunque se trata de un tema importantísimo y serio.

El domingo 25 de marzo de 2012, a las 19:37 horas, se produjo un fuerte movimiento telúrico, que disparó todas las alertas y sistemas de emergencia de Chile. Fue el equivalente a la energía desprendida de una explosión de TNT de entre 199 y 250.000 toneladas. Piñera estaba en Asia cuando recibió esta “bomba” de noticia por teléfono.

Como sucedió en el terremoto del 27 de febrero de 2010, todos sentían la necesidad imperante de saber la magnitud. Apenas finalizado, todos buscaron informarse de los deseados números de la escala de Richter en la televisión y la radio. Y así comienza la polémica nuevamente.

Existe una especie de fetichismo con el “número” de intensidad. Parece ser algo “heroico” sobrevivir a un terremoto más fuerte y lo más triste es que después de todo, se sobrevive o no. Y si no, entonces poco interesa el dato científico estadístico. Pero más allá del número, también están los que discuten algo importantísimo; bueno, para los que discuten… ¿Temblor o Terremoto? ¡Qué pregunta! Comenzando por la base de que no existe una diferencia de magnitudes entre “temblor” y terremoto, la gente se empecina en determinar, cuándo deja de ser uno para convertirse en el otro. “Temblor fuerte”, “sismo de mediana intensidad”, “temblor” y “terremoto”, son lo mismo en esencia; son movimientos de las placas terrestres. Terre (tierra) moto (movimiento). Sismo, viene del griego (σεισμός) y significa sacudida, también.
El “temblor”, no es de las paredes, es de la tierra.

Todos al fin, son sinónimos, no escalas de medición. Para solucionar ese problema, el Sr. Charles Francis Richter, junto con Beno Gutenberg, inventaron la escala que lleva su nombre, para no caer en subjetividades folclóricas como el “temblor”, “sacudida”, “terremoto”, “fuerte” o “Suave”, según nos parezca, nos dé la impresión o el ruido de los cristales. Todo esto me hace recordar el señor que decía en la tele, que el vaso con agua, nunca fallaba en avisarle. Ciencia pura. Si temblaba el agua, era temblor, si se le caía el vaso de la mesa de luz, entonces, no quedaba duda, era terremoto. Nunca falla.

El Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, fue entregando diferentes informes de magnitudes, mientras procesaba los datos obtenidos de las estaciones de medición: 5.8, 6.4, 6.8 y final y definitivamente, 7.1 grados en la escala de Richter. Como siempre, las odiosas comparaciones surgieron, ya que el USGS (Servicio Geológico de Estados Unidos) primero informó una medición de 7.2 y finalmente corrigió a 7,1 grados en la escala de Richter. Sí, cuándo USGS dijo 7.2, en Chile se dijo 5.8. Es mucha diferencia… Pero en el fondo no se los puede culpar, no es fácil calcular con precisión, mientras te mueven el piso y te piden: ¡Rápido! ¡Rápido! ¡¿Cuánto midió?!

¿Qué querés… velocidad o precisión?

MGC.



¡PORQUE SÍ!


29.02.2012


Cuando éramos niños, había una respuesta en particular que nos hacía irritar al recibirla: “Porque sí”.

A veces venía acompañada de “y punto...” como para terminar con la posibilidad de seguir discutiendo la llave maestra de las respuestas paternales. Pasaba el tiempo y con la madurez cada vez nos parecía más injusta la respuesta. De hecho era algo irritante no recibir una razón, cuando ya dominábamos el concepto de que todo tiene una razón. Sabíamos con claridad que la respuesta en particular, venía sólo cuando no nos querían dar explicaciones. Evidentemente la recibíamos igual, incontables veces.

Recuerden que somos de una generación en la que se pedía permiso para salir, para quedarse en la casa de un amigo, en resumen para no ser muy largo, para todo. Si algunas cosas tenían “porqué”, ¿por qué algunas no? Hoy, un poco más grande y con unos días más de vida, me resuena en la cabeza esa respuesta y me satisface. Sí, no me equivoqué. Me satisface. Si creían que los padres pueden ser injustos con una respuesta, esperen a ser adultos y ver qué pasa cuando la vida te dice “porque sí”. A ver quién le discute y le hace cambiar de parecer... Ahora no hay pregúntale a tu madre o tu padre... No hay otra opción.

Llámenle incomprensión, destino, casualidad, Dios, utopía o cien mil sinónimos de resultado “porque sí”. Si hubiera aceptado esa respuesta de niño, hoy tendría ganado un montón de tiempo de entendimiento, de que hay cosas en las que no importa la razón. Piensen y se van a dar cuenta, de que fácilmente o muy en el fondo, mucho termina siendo “porque sí”.

MGC.