Los geisers del Tatio se encuentran a una altura de 4.320 metros sobre el nivel del mar y para ver las columnas de vapor en su plena magnitud, se recomienda visitarlos con el amanecer. El detalle de la hora, es que la temperatura se encuentra bajo cero. En la época del año que los visité, habían 14 grados bajo cero. Para un uruguayo nacido a nivel del mar, la altura deja bastante poco oxígeno, cosa que dificulta la toma de fotografías en el momento de controlar la respiración para disparar. Cada bocanada de aire cuenta y si no está, se siente y mucho.
Para aquellos que suban a fotografiar, les recomiendo practiquen con guantes puestos, pues regular velocidad y diafragma se va a convertir en todo un desafío.
A pesar de todo, al ver semejante espectáculo de la naturaleza, cualquier inclemencia se olvida.
Una experiencia inigualable.
Saludos!
Más Atacama
Marcelo.
domingo, 3 de octubre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario